miércoles, 22 de diciembre de 2010

La casa transparente 4

Me siento bien en casa. Soy del tipo hogareño. Me gusta regresar y recobrar la memoria. Siento como el hogar es una suerte de organismo vivo, un meme cabezudo y egoista que únicamente prentende nacer, crecer, reproducirse y (supongo que algún día) morir.

La casa transparente nunca ha dejado de estar. Quizás otras revistas, otros sitios y otros foros públicos posean sus reglas de periodicidad, y aspiren a cumplir horarios y calendarios para sus lectores y asistentes. Eso está bien. Pero a la casa transparente le gusta ronronear.

Parece que la casa transparente no se fía mucho de algunas obligaciones. Especialmente si no son las que ella misma decide asumir. Este organismo memético pretende crear libertades amables (que se puedan amar) y parece obviar, sosegadamente insumisa, algunas reglas.

Así que tarda... lo que tarda. Está aquí. Silenciosamente



Juan-Yanes-L’Assut-d’Or7____ Fotografías de: JUAN YANES


  • Ernesto Suárez: Isla y haiku. Aproximaciones.

  • Daniel Bellón: Diez fragmentos alrededor de Tiempo, de Vicente Luis Mora

  • Coriolano Gonzalez Montañez: Así el haiku (Una aproximación al silencio)

  • José Marrero y Castro: La vehemencia del silencio

  • Germán Machado Lens: Cuatro poemas de Peregrinar del sustanciero [separaciones mínimas]

  • Carlos Bruno Castañeda: 2 Sólidos irregulares

  • Daniel Bellón: 4 poemas prospectivos

  • Cuarto de traducir:

    Gwendoline Brooks da voz al silencio.

    Forugh Farrokhzad: Sólo el sonido permanece

    Los cuadernos de La Calle de la Costa: La ciudad se rompe y se levanta, de Anelio Rodríguez Concepción